Las ENT matan a más personas que las balas o las bombas y las personas mayores son víctimas ocultas

20 de junio de 2018

Ningún evento altera más al sistema de salud de un país que una emergencia humanitaria. En estas situaciones, las condiciones manejables como la diabetes y las enfermedades cardiovasculares pueden volverse mortales. Los desastres naturales y los conflictos geopolíticos precipitan los cortes de energía y la escasez de suministros médicos que pueden significar la vida o la muerte para las personas con una enfermedad no transmisible (ENT).

Las ENT matan a más personas que las balas o las bombas

Esta situación se puede ver claramente en Siria, donde las ENT son responsables del 46% de las muertes, superando el número de lesiones por traumas relacionados con la guerra. Las ENT son la principal causa de muerte a nivel mundial, y es en los países de bajos y medianos ingresos donde esta carga cambiante de la enfermedad está ocurriendo más rápido. Este cambio se debe en parte al rápido envejecimiento de la población. Los países de bajos y medianos ingresos albergan el mayor número de personas mayores, allí viven actualmente 7 de cada 10 personas de 60 años o más. Para el año 2050, esta cifra aumentará a 8 de cada 10. Para las personas mayores en estos países, las ENT representan el 90% de la carga de morbilidad.

Las víctimas ocultas de ENT en emergencias humanitarias: las personas mayores

Por lo tanto, las personas mayores son más susceptibles a las ENT que cualquier otro grupo de edad, y viven cada vez más en países de bajos y medianos ingresos. También se encuentran en lugares como Siria, Irak y Ucrania, donde se producen algunas de las peores crisis humanitarias del mundo.

Más personas mayores se ven afectadas por emergencias humanitarias de lo que piensas. Hasta 14 millones de personas mayores con discapacidad se ven actualmente afectadas por crisis humanitarias, según el estudio Missing Millions de HelpAge International, y se estima que 26 millones de personas mayores se ven afectadas por desastres naturales cada año, según Age International. Se estima que la mitad de las personas desplazadas por el conflicto en Ucrania también son mayores.

Los factores que se cruzan con el envejecimiento de la población y las ENT no son lo más importante cuando se piensa en grandes crisis humanitarias. Tal vez sea porque muchas personas mayores no sobreviven a los desastres en primer lugar. El 65% de las personas que fallecieron durante el tsunami japonés de 2011 tenían 60 años o más, al igual que el 70% de las personas que murieron durante el huracán Katrina en 2005.

Para aquellos que sobreviven, el acceso a la atención y la medicación para una ENT a menudo es crítico para su salud. Entre los refugiados sirios de mayor edad en Jordania y el Líbano, las ENT son la razón más común para buscar tratamiento de salud. Según Hidden Victims, un informe de 2014 de HelpAge International y Humanity & Inclusion, el 54% de los refugiados mayores encuestados se vieron afectados por las ENT. En una evaluación rápida de las necesidades que HelpAge llevó a cabo en Indonesia entre las personas desplazadas por la erupción del Monte Agung en 2017, el 63% de las personas mayores encuestadas tenían una condición de salud crónica.

El acceso a la asistencia y la atención sigue siendo un desafío serio

Pero acceder a cualquier tipo de asistencia humanitaria y mucho menos a la atención médica es especialmente difícil para los sobrevivientes de mayor edad en una emergencia. En una encuesta puerta a puerta a 7  mil sobrevivientes del tifón Haiyan en Filipinas, HelpAge descubrió que el 27% de las personas mayores no recibía asistencia para refugios, y el 22% dijo que la ayuda alimentaria que recibían no era adecuada, dado que las personas con diabetes o presión arterial alta necesitaban una dieta baja en azúcares y sal.

La asistencia médica también puede encontrarse muy lejos o con muy difícil acceso. En Cox's Bazar, Bangladesh, donde muchos rohingyas han huido para escapar de la violencia en la vecina Myanmar, los campos de refugiados son improvisados y sin pavimentar. El área también es conocida por su temporada de lluvias intensas que puede provocar inundaciones severas. Estas condiciones son desafiantes para cualquier persona, pero a menudo son imposibles para una persona mayor que tiene dificultades para caminar.

HelpAge trabaja en 60 países para garantizar que las comunidades estén preparadas para atender a las ENT en una crisis humanitaria. Trabajamos con ONG locales y asociaciones civiles para desarrollar planes de preparación ante emergencias que respondan a las necesidades de salud de los más mayores de una comunidad, y capacitamos al personal de atención médica para que esté equipado para atender a las personas con ENT. En Líbano, donde viven hasta 1,5 millones de refugiados sirios, HelpAge trabaja con socios locales para brindar atención médica a personas mayores con hipertensión y diabetes, incluidas consultas médicas, pruebas de laboratorio y medicamentos. Hasta ahora, hemos ayudado a cerca de 4.000 personas en el Líbano a manejar sus enfermedades crónicas y hemos capacitado a más de 600 proveedores de atención médica en la detección temprana de ENT.

Apóyanos para ayudar a las personas mayores en crisis humanitarias

Con la Reunión de Alto Nivel de las Naciones Unidas sobre ENT en septiembre, únete a nosotros para resaltar la importancia de apoyar a las personas mayores en las crisis humanitarias. Hay millones de personas que viven con enfermedades crónicas en todo el mundo cuyo sufrimiento no debe dejarse de lado. Si realmente queremos alcanzar la cobertura universal de salud, las personas que viven con ENT merecen acceder a la atención, al tratamiento y a las medicinas que necesitan, ya sea en tiempos de paz o durante una emergencia. Instamos a los gobiernos a que no solo den prioridad a las personas más vulnerables en las crisis, sino también a garantizar que el acceso equitativo sea una realidad para todas las personas en todas partes.
 

Acerca de la autora

Kate Bunting (@katebuntingdc), es la Directora General (CEO) de HelpAge USA, desde joven es activista y militante, ha invertido su carrera de 25 años en políticas de desarrollo internacional e incidencia para crear grupos dedicados a combatir la pobreza mundial. Kate supervisa iniciativas que fortalecen la inclusión humanitaria y mejoran la salud a lo largo de la vida. En 2016, Kate fue reconocida por su trabajo con el Premio Hilton de HelpAge USA. Anteriormente, Kate desempeñó un papel de liderazgo en la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional dirigiendo los asuntos públicos y el alcance de las partes interesadas en iniciativas clave para la seguridad alimentaria, la salud mundial y las emergencias humanitarias.

HelpAge USA es la afiliada de EE. UU. de HelpAge International, una organización mundial sin fines de lucro dedicada a promover el bienestar y la inclusión de las personas mayores. En un momento de cambios demográficos sin precedentes, HelpAge incide por sistemas y políticas de salud que satisfagan las necesidades de un mundo envejecido. Nuestros programas brindan a las personas mayores y sus familias recursos y servicios para manejar su salud, incluidas las pruebas de detección de ENT y exámenes oculares para prevenir la ceguera. Para obtener más información sobre los programas de HelpAge y los desafíos de salud en un mundo que envejece, visita  www.helpageusa.org.